«El ‘lawfare’ sigue vivo en la región, destruyendo nuestras democracias. Se cayeron las mentiras contra Lula en Brasil y se van a caer acá (Argentina)», sentenció el defensor de los derechos humanos.

El presidente brasileño asistirá a la cumbre del Mercosur, pero no se reunirá con Milei. En cambio, espera autorización judicial para visitar a Cristina Kirchner en su domicilio.

Los fiscales de la causa contra la expresidenta rechazaron la solicitud de prisión domiciliaria para Cristina Fernández pese a su edad, riesgo de vida y relevancia política.

De acuerdo con el demandante, el abogado Daniel Llermanos, la inhabilitación de CFK violenta la soberanía popular que ningún poder -ni la Corte Suprema- puede impedir, porque se trata de un cargo público electivo.

Durante la sesión urgente, se decidió crear una mesa de trabajo que planifique las estrategias para acompañar a la expresidenta los próximos días y consolidar al peronismo como una alternativa electoral.

Agrupaciones sindicales, sociales y políticas activan medidas de fuerza en apoyo a la exmandataria, con cortes viales, concentraciones frente a tribunales y una vigilia en las afueras de su domicilio en Constitución.

La central obrera comparó explícitamente el fallo con la persecución al exmandatario brasileño y alertó: «La democracia está en peligro».

“La justicia actúa de forma acelerada para ver si la pueden sacar de la cancha», dijo el senador José Mayans.

La expresidenta argentina califica el fallo de la Corte Suprema como una estrategia del poder económico para impedir la reorganización del campo popular ante el fracaso del modelo neoliberal

La condena se fundamenta en el supuesto direccionamiento de contratos de obra pública hacia el empresario Lázaro Báez durante su presidencia (2007-2015), acusación que la dirigente y sus defensores califican de persecución judicial sistemática.